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Nuestra Ubicación

NUESTRA UBICACIÓN EN EL UNIVERSO
Por: Alberto Quijano Vodniza
Master en Física – Universidad de Puerto Rico
Miembro de la “American Astronomical Society”
Fundador y Director del Observatorio Astronómico de Pasto

Si en una noche limpia y clara dejamos que nuestros ojos se embriaguen con el palpitante licor emanado de fuentes distantes de infinita luz, hemos de sentir en las profundidades de nuestro ser la nostalgia del pasado en compañ1a de extrañas sensaciones de aparente soledad y misticismo. Y esto por qué?

El hombre es poblador de un planeta que junto con ocho más y otros cuerpos celestes, se mueve alrededor de una estrella relativamente pequeña denominada Sol, descri­biendo un perfecto rito cósmico. Nuestra estrella no es la más grande, ni la más importante del Universo. Es un astro relativamente pequeño, pero es en definitiva la fuente de vida para el hombre, animales y vegetales. Alrededor del sol está un planeta muy pequeño llamado Mercurio en cuya superficie la vida es imposible, su paisaje más bien se parece a un gran desierto. Luego encontramos a Venus, que los antiguos lo identificaron con el amor y la belleza, pero realmente y como lo expresó el ilustre científico Carl Sagan, “lo más parecido al infierno es Venus”. En la atmósfera de Venus existe ácido sulfúrico diluido  y las temperaturas son extremas, su hábitat es incompatible con la vida. Su espesa atmósfera produce un gran efecto invernadero en el planeta, algo semejante a la situación que se tiene cuando se deja en un automóvil cerradas las ventanas durante un día muy caluroso. Las temperaturas que se originan en su interior son elevadas. Después de nuestro hermoso planeta azul, único planeta en el sistema solar, en donde surgió la vida y después de muchos millones de años se desarrolló la inteligencia, encontramos en nuestro viaje imaginario al planeta Marte. Por el momento, su hábitat es inhóspito para la vida humana, pero con ingeniería sofisticada y en tiempo muy grande, se transformarán sus condiciones, hasta convertirlo en nuestro segundo hogar.

El día de Marte es tan sólo 37 minutos con 23 segundos más largo que el terrestre, su año equivale a 687 días terrestres. Posee estaciones pero sus condiciones son muy difíciles: Su atmósfera posee 95% de dióxido de carbono, 1.6% de nitrógeno, 1.3% de oxígeno y 0.3% de vapor de agua. Además el rango de temperaturas es extremadamente amplio  y varían entre +22 grados y –125 grados centígrados; su presión atmosférica es muy débil, casi 125 veces más pequeña que la terrestre. La gravedad es  2.63 veces menor que la de nuestro planeta. Marte tiene dos satélites Phobos (Pánico) y Deimos (Terror).  Actualmente se investiga mucho su estructura y dinámica con diversas sondas espaciales.

El cinturón de Asteroides, constituido por material que no pudo formar un planeta, está ubicado entre Marte y Júpiter.

Luego siguen los gigantescos planetas Júpiter y Saturno, que ostentan más de medio centenar de satélites rindiéndoles pleitesía.

Si a estos objetos celestes le sumamos los asteroides del Cinturón de Kuiper y cometas de la Nube de Oort, conjuntamente con polvo espacial y desechos, tendremos a nuestro barrio cósmico, bastante inmenso para las longitudes que usamos común y corriente, pero simplemente un granito de arena, en la inmensa playa cósmica.  La nave Pioner 10 que salió de la Tierra el 3 de marzo de 1972, se aproximó a Júpiter el 3 de diciembre de 1973 y después de más de 30 años, recién está saliendo del sistema solar y no va en dirección hacia una estrella cercana. Con la velocidad de tortuga que posee, emplearía 80.000 años para llegar a la estrella más cercana!. Realmente no hemos progresado mucho en la tecnología de los viajes espaciales. Actualmente se ha presentado una gran discusión en el mundo científico tratando de explicar la famosa “Anomalía Pioner”, que se resume en la “presencia una fuerza de tipo no-gravitacional”, dirigida hacia el sol, que ha frenado muy sutilmente el movimiento de la sonda. Hay un déficit de aproximadamente 400.000 kilómetros en el recorrido de las sondas Pioner!!….

Nuestro sistema pertenece a una familia mucho más grande denominada Vía Láctea, por su semejanza a una mancha de leche, visible en la bóveda ce­leste nocturna como una banda de luz difusa, compuesta por 400 mil millones de estrellas y cuyo diámetro es de tal magnitud, que la luz viajando a la fantástica velocidad de 300.000 kilómetros por cada segundo emplea cerca de 100 mil años en recorrerlo! Una tribu africana la llamaba el Espinazo de la Noche, pues según su pensamiento era la columna vertebral del Universo y sin su existencia las estrellas se “caerían”. Los cristianos pensaban que la Vía Láctea era el Camino de Santiago que utilizaban las almas para llegar al Cielo…Por cierto había bastantes almas “subiendo” al cielo en esas épocas…!

En astrofísica a la distancia cu­bierta por la luz durante un año se denomina año-luz… Una distancia evidentemente enorme. Miremos otros datos: La estrella más cercana a la Tierra, sin tener en cuenta el Sol, es Próxima Centauro que dista 4 años luz y la galaxia vecina M31 “ubicada” más atrás de la constelación de Andrómeda, que es la galaxia más cercana a la nuestra está tan lejos que un rayo de luz emitido en ella llega a la Tierra después de 2 mi­llones quinientos mil años! Cuando miramos a esa galaxia en una noche tranquila, realmente la estamos viendo cómo fue hace mucho tiempo atrás!…Al mirar el cielo estrellado no vemos el presento sino que estamos contemplando el lejano pasado!

La información viaja a una velocidad muy lenta comparada con las dimensiones cósmicas, aunque viaja a la velocidad de la luz.  Ahora bien, para viajar a través del universo conocido se necesitaría un tiempo mayor que la edad del Cosmos, si empleamos las naves convencionales…

El telescopio Hubble ha descubierto últimamente gran cantidad de galaxias, galaxias denominadas niñas, que están  relativamente “cerca” de lo que llamaríamos el “punto” donde ocurrió la Gran Explosión….(Es muy difícil interpretar con palabras comunes una fenomenología compleja y poco conocida).

Lo que observamos a través de los telescopios y examinamos con los radiotelescopios, en este momento, realmente no corres­ponde al presente de las estrellas. Estamos descifrando su pasado distante. En el acto mágico de contemplar el cielo nocturno se funde nuestro fugaz presente con el pasado estelar y con el futuro de nuestros sueños.

Se sabe en la actualidad que existen cerca de 100 mil millones de galaxias, cada una con un promedio de  centenares de miles de millones de estrellas y con la probabilidad de existencia de tantos planetas como estrellas, es decir,  miles de trillones de planetas! Muchas cunas de vida disemi­nadas por el espacio. El número de estrellas que hay en el cielo es mucho mayor que los granitos de arena contenidos en todas las playas de la Tierra! El gran pensador Giordano Bruno había establecido que cada estrella que miramos en el cielo es el centro de otro sistema planetario y que debería existir en cada uno de esos nuevos sistemas solares, por lo menos un planeta con vida. A Giordano Bruno la Inquisición lo envió a la hoguera!..Y hoy se sabe, que realmente las estrellas, reactores nucleares de fusión, son centros de otros sistemas planetarios y se están descubriendo gran cantidad de planetas alrededor de otras estrellas! Giordano Bruno tenía razón!.

La Tierra es un granito de arena insignificante dentro del contexto universal y el hombre debe ser conciente del lugar que ocupa en el Cosmos. Sólo aceptando su verdadera magnitud, alcanzará la grandeza.

Es el hombre el único ser inteligente en el Universo? Seguramente nó. Las múltiples posibilidades evolutivas no pueden haber desperdiciado las ilimitadas regiones de Univer­so, sembrando vida únicamente en nuestro planeta. Por lo tanto es muy probable la existencia de otras civilizaciones, algu­nas de ellas mucho más avanzadas que la nuestra que han po­dido convivir con su alta tecnología. Desgraciadamente nues­tro planeta está en un punto histórico crítico, hay satura­ción de guerras y conflictos y tiene profundos problemas con la tecnolog1a nuclear creciente. Con una sola orden apoca­líptica de cualquiera de las potencias mundiales, se podría borrar la vida de la faz de la Tierra, en una guerra que no tendría vencedores. Confiemos plenamente que el ser humano no se dejará gobernar por el corazón de reptil incrustado en las capas más profundas del cerebro, producto de la lucha por la su­pervivencia de las primitivas etapas de la evolución y estará en todo momento acorde con la armonía del Universo, como corresponde a los hijos de las estrellas que somos to­dos nosotros, y transformará el grito de odio en poema de vida que germinará en cada punto de la Tierra.

Nuestro Universo es gigantesco, pero no infinito. De acuerdo a la Teoría de la Relatividad es finito pero ilimitado. Dos palabras que tienen diferente significado. De acuerdo a la Teoría de la Relatividad, hay una especie de Mágica Trinidad: Espacio-Tiempo-Materia. No se puede separar a estos elementos, no existe el espacio independientemente del tiempo y sólo hay espacio-tiempo donde hay materia. Entonces no tiene sentido preguntarse, quién fue primero: el espacio o el tiempo ni tampoco preguntarse por lo que hay más allá de la “frontera” del Universo. Hubble y Humason encontraron que el Universo se está expandiendo con velocidad constante y por tanto, dependiendo de la cantidad de materia existente en él, el Universo puede seguir expandiéndose o por el contrario si la materia es suficiente, por efecto gravitacional, el Universo dejaría de expandirse y empezaría luego la contracción, hasta llegar al mismo “punto” de origen….Pero, datos recientes, indican que el Universo no se expande con velocidad constante sino que está haciéndolo de forma acelerada..!!  Es muy complejo el comportamiento del Cosmos! Por ese motivo los teóricos han introducido el concepto de “ENERGÍA OSCURA”, que sería la responsable de esa aceleración!

Si ahora imaginamos (con la misma libertad que poseen los niños) y colocamos en un recipiente todas las galaxias, estrellas, planetas, satélites cometas, diversidad de seres inteligentes y no inteligentes, electrones, protones, partículas elementales, partículas exóticas, etc…. a ese conjunto lo llamamos nuestro Universo….Pero hay teorías muy complejas que hablan de la existencia de otras “cajas”, de otros recipientes, que se denominan Universos Paralelos.

Y existen otros modelos mentales, otras filosofías, que sustentan que el ser humano es un Microcosmos, en el cual existen “reflejos” del Cosmos inmensamente grande……

Ahora bien, en el bello mundo de la Literatura, los grandes Maestros ayudados por la inspiración de los Dioses, dibujan continuamente en el papel los signos cabalísticos de la profecía, por ejemplo, Dante dividió al Infierno en varios recintos con numerosas subdivisiones o círculos para separar los castigos y clasificarlos adecuadamente… En cierta forma el autor  se adelantó intuitiva y poéticamente muchos siglos a la concepción de la existencia de los niveles energéticos  en el mundo atómico; o también a una posible división del Universo en dimensiones.

En el Microcosmos, podemos imaginar  a los electrones (que a veces tienen comportamiento de partículas y en otras ocasiones ondulatorio….pero no simultáneo) habitando en los niveles atómicos,  saliendo de sus recintos habituales únicamente bajo la excitación energética y  regresando a sus moradas tras devolver la energía adicional que los excitó, en forma de ondas electromagnéticas.

Además de la poesía brillante, Dante sobresale por su enorme intuición que lo capacita en esa época para exponer en cierta forma la esfericidad de la Tierra en el último Canto del Infierno en una lejana época en que se negaba rotundamente la hipótesis citada, pues Dante nació en 1265 y murió como ha sucedido con muchos grandes hombres, en el destierro en 1321:

“Dante se abrazó a Virgilio y cuando Lucifer se inclinó para intentar inútilmente un vuelo, el Maestro saltó sobre sus hombros sin que el demonio lo advirtiera. Fueron descendiendo a lo largo de aquel cuerpo, como si lo hicieran en una montaña, bajando de árbol en árbol. ASI LLEGARON AL CENTRO DE LA TIERRA… Y COSA EXTRAÑA, AHORA, EN VEZ DE BAJAR SUBIAN! Por el hueco de un peñasco, abandonando el cuerpo de Satán, pasaron a un lugar de grutas y cavernas… Y de pronto por un resquicio, pudo ver Dante las estrellas de un nuevo cielo”.

Es notable también la descripción brillante que hace en el mismo canto, de la Cruz del Sur, constelación desconocida entonces hasta para los más audaces navegantes:

“Ya estaban los poetas fuera del Infierno pero todavía en las entrañas de la tierra. Desde donde estaban, Dante vio las enormes piernas de Lucifer que se extendían hacia arriba. Por las escarpadas rocas fueron trepando sin descanso. Y de pronto, por un resquicio, Dante pudo ver, con inmensa alegría, las estrellas de un nuevo cielo… Para entrar al Purgatorio, pidió Dante el auxilio de las musas para cantar dignamente al Segundo Reino.  Tendió luego su mirada por el espacio y vio a su diestra cuatro estrellas, que sólo vio la primitiva gente”.

Quizá nuestro Universo esté formado como lo intuyó Dante de numerosos niveles: algunos muy densos,  otros más sutiles y otros en los cuales “la evolución cósmica de miles de  millones de años, transformó la materia en vida” como lo expuso acertadamente el científico Carl Sagan en su obra  Cosmos.

Surge aquí una pregunta inquietante: Es posible viajar por ese Universo tan inmenso a velocidades cercanas pero menores que la velocidad de la luz en un tiempo comparable a la vida de un hombre?

Empleando el “sentido común” del pensamiento la respuesta es NO!…..Pero la ciencia realmente no utiliza ese “sentido común” y la respuesta es AFIRMATIVA!!!….Para ello es necesario viajar ya no con medios convencionales sino empleando la Teoría de la Relatividad de Einstein.

Realmente no nos hemos acercado todavía a la “REALIDAD DE LA NATURALEZA”….